Por: Emiliano Tizapa Lucena, Jesús Guerrero y Arturo de Dios Palma.
Desencajados, inconexos, contradictorios; con abrazos y besos impuestos y por compromiso. Así fue el rostro que mostraron los nuevos integrantes en Guerrero de Movimiento Ciudadano (MC) durante su presentación hace unos días en Chilpancingo.
Los emecistas a nivel nacional han emprendido este proceso electoral 2024 intentando imponer una perspectiva de que representan una “nueva política”, alejados de las viejas prácticas.
Insisten que lo nuevo de hoy es MC, pero de nuevo no tienen nada.
MC ha alimentado sus filas en Guerrero con los excluidos provenientes del PRI y por los olvidados de Morena. Entonces, podríamos considerar que es el PRIMor anaranjado.
¿Por qué? Sólo sus dos nuevos cancilleres en Guerrero, Héctor Astudillo Flores y Mario Moreno Arcos, acumulan 44 años ocupando cargos de elección con el amparo del PRI: entre alcaldías, diputaciones locales y federales, senadurías y, claro, la gubernatura.
MC pretende, además, rescatar figuras oscuras como Lázaro Mazón Alonso, Alberto López Rosas y Sebastián de la Rosa Peláez.
¿Qué de nuevo hay en ellos? ¿Qué nuevo futuro se puede construir con gente del pasado? De un pasado donde desde otros partidos estos personajes han contribuido al empoderamiento de grupos fácticos que utilizan la impunidad y a las organizaciones criminales para mantener una sociedad controlada, empobrecida, insegura y corrupta.
La presentación de Moreno Arcos como el candidato al Senado por MC en Guerrero, fue un evento más fofo, fofo que “fosfo, fosfo”, a pesar de las banderas, atuendos, globos, moños y papelitos naranjas que colmaron el salón Cuicalli, el pasado 21 de febrero.
La visita del coordinador nacional de MC, Dante Delgado Rannauro, se dio en un ambiente tropicalizado priista-morenista.
Hubo acarreo hormiga y dividido, se entregaron cientos de banderas en la entrada, danzó un grupo de tlacololeros, hubo una comida y reunión previa con el Grupo Cuicalli [empresarios y sociedad civil], todo fue amenizado con la música del verdadero símbolo del partido naranja: el pequeño cantante huichol, Yawui.
Los nuevos emecistas gritaron, alzaron las manos y ondearon sus banderas. Las señoras de Chilpancingo que antes pomposas lucían los colores del PRI, esta vez solicitaban y apartaban un chaleco naranja.
Su ansiedad no era para menos. Héctor Astudillo, uno de los recientes caciques del PRI ha encontrado en MC su nueva casa, quien junto a Mario Moreno lograron hacerse de la franquicia que antes tenía el empresario Luis Walton Aburto quien falleció en 2023.
El ex priísta Luis Walton, ex aliado de Ángel Aguirre Rivero, tuvo a este partido naranja desde cuando se llamaba Convergencia y del que alguna vez fue líder nacional y senador de la República y alcalde de Acapulco.
La actividad del pasado miércoles la acapararon Astudillo Flores y Moreno Arcos. Fue su fiesta de bienvenida.
El ex gobernador sonrió, saludó, se dejó querer y brincó jubiloso en varias ocasiones de su asiento tras el coreo de su nombre.
Astudillo Flores aseguró que no participará para ningún cargo y que sólo se dedicará a fortalecer a MC en Guerrero, aunque no aclaró, si su hijo Ricardo tendrá algún premio plurinominal o candidatura local.
¿A caso Héctor Astudillo representa algo nuevo con 26 años en cargos públicos?
El ex gobernador inició su carrera política en 1991 como encargado de despacho de la presidencia municipal de Chilpancingo; del 92 al 93 fue secretario particular del gobernador, José Francisco Ruiz Massieu; del 94 al 96 fue diputado local; del 96 al 99 fue presidente municipal de Chilpancingo; del 99 al 2000 fue diputado local; del 2000 al 2003 fue senador; del 2003 al 2006 otra vez senador; hizo una pausa en 2005 para contender por la gubernatura, la cual perdió ante el entonces perredista Zeferino Torreblanca; de 2009 a 2012 ocupó la alcaldía de Chilpancingo; de 2011 a 2015 fue por tercera ocasión diputado local; de 2015 a 2021 fue gobernador, todo por el PRI.
Es claro que la mira de Astudillo Flores estaba en la dirigencia nacional del PRI, y que su salida del partido fue labrada por el líder nacional, Alejandro Moreno Cárdenas, y el grupo de Manlio Fabio Beltrones, quienes coparon las candidaturas, entre ellas, la reelección de sus allegados, como en Guerrero la de Manuel Añorve Baños.
Básicamente a Astudillo Flores le aplicaron un poco de su propia medicina. Y su decisión fue salir del PRI.
Moreno Arcos por su parte, representa 18 años en cargos públicos: de 1996 a 1999 fue síndico de Chilpancingo; del 99 al 2002 fue diputado local; de 2003 a 2005 fue diputado federal; de 2005 a 2008 fue alcalde de Chilpancingo; de 2009 al 2012 diputado federal; de 2012 a 2015 alcalde de Chilpancingo; y en 2021 perdió la candidatura a gobernador, todo por el PRI.
Durante su presentación en MC, Moreno Arcos lanzó por delante a su familia. Después mencionó a Dios, que gracias a él, aseguró, a pesar de que en el PRI no lo aprovecharon MC le ofreció la candidatura que buscaba.
Basado en la familia y la fe, la cúspide del insulso discurso de Moreno Arcos fue que “regresará la paz” a Guerrero al llegar al Senado.
¿Cómo Mario Moreno se atreve a prometer tal cosa, acaso no recuerda que Chilpancingo en su último trienio vivió miedo y zozobra con el denominado Comando Negro [hombres armados, presuntos policías] que tenía impunidad en las calles para secuestrar, asesinar y aterrorizar a la ciudad?
¿Acaso se nos olvidó que hubo señalamientos directos contra Moreno Arcos del empresario Pioquinto Damian Huato [a quien también se le vincula con organizaciones criminales] de que siendo alcalde envió a hombres armados a asesinarlo y que mientras siguiera gobernando la capital seguiría bajo el control de la delincuencia organizada [Los Rojos en aquellos años]?
Los resultados en seguridad de Moreno Arcos fueron altamente cuestionados por sus nexos con organizaciones criminales, situación similar al actual gobierno capitalino de la morenista Norma Otilia Hernández Martínez.
En 2014, incluso, el entonces gobierno federal de Enrique Peña Nieto, envió para tomar el control de la seguridad de Chilpancingo gobernada por Moreno Arcos a un representante de la Policía Federal, Omar García Harfuch, ante la ola de asaltos y cobros de piso.
En ese año, la explosión en Guerrero ocurrió el 25 y 26 de septiembre cuando en el municipio de Iguala, todas las autoridades de la región y el estado se vieron involucradas por la connivencia de fuerzas de seguridad pública y hombres armados de organizaciones criminales para atacar, asesinar y desaparecer a estudiantes de Ayotzinapa: en ese caso la atención se centró sólo en Guerreros Unidos. Pero Los Rojos tenían el control de Chilpancingo en condiciones similares.
Días antes de que Mario Moreno hiciera de manera pública su ingreso a las filas del MC, el ex alcalde de Chilpancingo, Efrén Leyva Acevedo, declaró a los medios que en el 2011 hubo una fuerte división en el PRI con la salida del ex gobernador Ángel Aguirre Rivero luego de que no fue nominado para la candidatura a la gubernatura y aceptó irse al PRD para ser abanderado de este partido con el que ganó la contienda electoral constitucional derrotando a su primo Manuel Añorve Baños.
Efrén Leyva recordó que con Aguirre se fueron muchos priístas y otros permanecieron en el PRI pero apoyaron a Aguirre y se les expulsó porque no apoyaron a Manuel Añorve.
Efrén Leyva no dijo nombres pero, obviamente, uno de esos priístas siniestros que desde el PRI operó para Aguirre fue Mario Moreno. Y qué coincidencia, en esa elección del 2011 que el PRI fue derrotado por la alianza PRD-MC y PT, que postuló a Aguirre, el coordinador de la campaña de Añorve, fue Héctor Astudillo quien ahora con Mario Moreno son la dupla fuerte en MC.
En 2014 gobernaba en el estado el priista-perredista, Ángel Aguirre Rivero, y en ese tiempo su secretario de Salud era el dos veces alcalde de Iguala, Lázaro Mazón Alonso.
Mazón Alonso fue obligado a renunciar a su cargo en el gabinete de Aguirre por la cercanía que tenía con su ahijado político, el alcalde perredista de Iguala, Jose Luis Abarca Velázquez, quien se encontraba prófugo y era responsabilizado de todos los ataques y desapariciones de los normalistas.
Sin embargo, ser el que recomendó para la alcaldía de Iguala a Abarca Velázquez al PRD, no fue el único señalamiento contra Mazón Alonso.
En 2014, el ex presidente municipal de Teloloapan, Pedro Pablo Urióstegui Salgado denunció en una entrevista telefónica que: “Cómo es posible que anden los criminales en los ayuntamientos disfrutando. Cuando viene el gobernador del estado anda con ellos. Ahí está Lázaro Mazón quien hizo compromisos con la delincuencia organizada y ellos tienen todo porque tienen dinero”.
Diez años después, el mismo Lázaro Mazón también ha recaído en MC para buscar continuar en la política, tras su paso infructuoso en el PRD y Morena.
Pedro Pablo Urióstegui fue asesinado en 2021, fue bastante cuestionado porque fundó en Teloloapan una autodefensa relacionada con Guerreros Unidos, para enfrentar a sus rivales: La Familia Michoacana y Los Tlacos.
El ex edil de Teloloapan Pedro Pablo Urióstegui fue compadre del senador Félix Salgado, quienes hicieron su carrera política juntos desde 1988 en el entonces Frente Democrático Nacional (FDN).
Con estos antecedentes y acusaciones: ¿Qué proyecto que se dice ser nuevo puede incluir a personajes como Mazón Alonso en sus filas?
El colmo fue que en la presentación de MC en Chilpancingo, un asistente portó una playera negra con la leyenda: “Nos hacen falta 43”. ¡Vaya contradicción!
Otro que MC busca relanzar es a Alberto López Rosas, el ex alcalde de Acapulco y ex procurador de Justicia estatal durante el gobierno de Ángel Aguirre Rivero, cuando el 12 de diciembre de 2012 fueron asesinados en la autopista del Sol dos estudiantes de Ayotzinapa en un operativo policiaco. Esa mancha Alberto López Rosas no se le ha podido quitar.
El tercer personaje que desde el movimiento naranja busca mantener poder político es Sebastián de la Rosa Peláez, quien se ha enriquecido al amparo de cargos públicos, y que dió entrada al PRD a personajes como José Luis Abarca, lo que ha llevado al declive al Sol Azteca.
Antes del Caso Iguala, fuentes cercanas a Abarca han señalado que De la Rosa Peleaz era asiduo visitante del entonces presidente municipal de Iguala.
En el caso de los morenistas llegados a MC, Masedonio Mendoza Basurto, actual diputado local, y Coyolxauhqui Soria Morales, ex diputada federal suplente de María del Carmen Cabrera Laguna entre 2018-2021, abandonaron Morena porque al igual que los priístas Mario Moreno y Héctor Astudillo, no les tocó hueso. Y es que en Morena, el que ordena y manda es Félix Salgado y no Jacinto González, líder de este partido.
CHIRRIONAZO. Hace unos días la alcaldesa Norma Otilia Hernández Martínez inauguró un camión para que turistas puedan recorrer las avenidas de Chilpancingo. Nos preguntamos: ¿Por qué no sacó el camión cuando estaba la parálisis del transporte público para que la ciudadanía se evitará la molestia de caminar?
No queda duda que es temporada electoral, porque Norma Otilia no desaprovechó y lanzó también una campaña de descuentos titulada: Normalízate. ¡Resultó creativa la alcaldesa de la marca!