Avispones, a 10 años de la tragedia en Iguala
ya no saltarán a la cancha

 

Por Jesús Guerrero
Foto: Óscar Guerrero

Los Avispones, equipo que lleva 37 años participando en el futbol profesional y que en el 2014 sus jugadores, equipo técnico y porristas fueron víctimas colaterales de la tragedia de Iguala, podría desaparecer o cambiar de sede en la próxima temporada.
Desde hace décadas las políticas públicas del gobierno estatal -cuya sede del Ejecutivo está en esta capital- y del municipio no las enfocan en fomentar la cultura, el deporte y recreación en beneficio de los jóvenes.

Las autoridades lo reconocen: en Chilpancingo hay más cantinas que escuelas y centros deportivos.

Bibliotecas, solo una, la de la Universidad Autónoma de Guerrero (UaGro) que tiene escasa bibliografía. Es más, no hay una sola hemeroteca de consulta de ediciones de periódicos y revistas.

De centros deportivos, existen dos de acceso gratuito al público: el Indeg, antes CREA, que está a dos cuadras de la residencia oficial de Casa Guerrero y, la cancha Galeana, en la colonia que lleva el mismo nombre y que pertenece al municipio.

La unidad del Polideportivo que a pesar de que es propiedad del gobierno del estado cobra una cuota al público que utiliza sus instalaciones. Es un complejo que cuenta con dos canchas de fútbol, un parque de béisbol, otra de fútbol rápido, alberca y pista de tartán.



 

La Universidad Autónoma de Guerrero (Uagro) tiene un centro deportivo que cuenta con una cancha de fútbol, de basquetbol, gimnasio y una pista de atletismo. Los usuarios pagan una cuota de recuperación.

En la cancha de fútbol con pasto sintético de este centro deportivo que está casi en el centro de Chilpancingo juega sus partidos el equipo de tercera división profesional “Las Águilas”.

En la colonia Los Ángeles, sus dos canchas, una normal y otra de rápido, están cerradas desde hace meses debido a una pugna que existe entre miembros de organizaciones criminales que han tenido el control de esa zona donde cada fin de año se desarrolla la Feria de Navidad y Año Nuevo de San Mateo.

Los dos grupos delictivos se disputan la administración de las dos canchas deportivas.

Ayer miércoles, jugadores e integrantes de la porra “Penca de Maguey” del equipo de futbol de segunda división “B” cerraron parcialmente la lateral sur-norte de la avenida Lázaro Cárdenas para pedir al gobierno estatal y el gobierno municipal que aporten recursos para el pago de inscripción ante la Federación Mexicana de Futbol (FMF) y no los dejen fuera del torneo que iniciará en las próximas semanas.



 

“Avispones no se va”, “Avispones no se va”, gritaron los de la porra “La Penca de Maguey” que es la que acompaña al equipo en sus encuentros que disputa en la cancha del Polideportivo Chilpancingo cuando recibe a sus contrincantes.

Los manifestantes realizaron la protesta frente al monumento de los 43. Aquí, la gente colgó varias lonas.

Algunos automovilistas que pasaban por el lugar tocaban el claxon de su vehículo en señal de solidaridad.

Ricardo Nava y Félix Morales, representantes de la porra de Los Avispones, dijeron que la FMF cierra los registros el próximo 15 de mayo para la participación en el torneo de la próxima temporada.

“Para que el equipo pueda participar se requiere un pago ante la FMF y por eso estamos pidiendo el apoyo del gobierno estatal y del municipio”, afirmó Ricardo Nava.



 

Avispones cumple en este 2025, 37 años de jugar profesionalmente de los cuales 34 estuvo en la tercera división y hace 3 años ascendió a la serie B de segunda división.

En septiembre de 2014, los jugadores de Los Avispones vivieron una noche trágica en Iguala cuando de regreso a Chilpancingo, a bordo de su autobús fueron atacados a balazos por policías municipales e integrantes del grupo criminal Guerreros Unidos.

En la agresión armada murió el jugador de 15 años de edad, David Josué García Evangelista, “El Zurdito” y el chofer del autobús, Víctor Manuel Lugo Ortiz y resultaron heridos de bala, el director técnico de equipo, Pedro Rentería, otros jugadores, un utilero y Omar Castro, “El Pañañas”, el integrante de la porra.

Los integrantes de este equipo que en ese entonces militaba en la tercera división profesional, fueron atacados a tiros en el crucero de Santa Teresa, en la carretera federal Iguala-Chilpancingo.

Esa misma noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014, el grupo Guerreros Unidos, policías municipales coludidos con el Ejército, la entonces Policía Federal -cuyo coordinador en Guerrero era Omar García Harfuch, titular de la SSPC-, Policía Estatal y Policía Investigadora Ministerial desaparecieron a 43 normalistas, asesinaron a tres más y a otros tres civiles, en distintos lugares de Iguala.



 

“Nuestro equipo también vivió la tragedia de ese 2014, el gobierno prometió justicia, no cumplió y ahora nuestros Avispones podrían desaparecer o que lo compren otros equipos de renombre como Toros Neza o Puebla”, dijo Ricardo Nava.

Durante la protesta los manifestantes denunciaron que el gobierno del estado ni siquiera apoya al equipo, pues debe pagar la renta de las instalaciones de la unidad deportiva llamado “Polideportivo”, que es donde entrenan y juegan sus partidos los integrantes del equipo.

“Esta unidad deportiva es del gobierno del estado y todo nos cobra, pero hacemos un llamado a la gobernadora Evelyn Salgado que nos apoye, ella ya nos conoce”, dijo Félix Nava.

El Polideportivo es administrado por el director del diario Vértice, Dan Castorena.

Durante la protesta llegó el director de cultura y deportes del ayuntamiento de Chilpancingo, Gabriel Morlet, quien informó que por cada temporada en la que participa Los Avispones se gastan 8 millones de pesos.



 

“Solamente por cada registro de los jugadores que van a participar en el torneo que dura 10 meses cuesta 10 mil pesos”, refirió.
El funcionario municipal les prometió a los inconformes que el alcalde de Chilpancingo, Gustavo Alarcón está dispuesto a instalar una mesa de diálogo para que se llegue a un acuerdo con los apoyos que se va a dar al equipo.

Actualmente el presidente de Los Avispones, es el empresario gasolinero Sergio Alcaraz, quien al frente del equipo su desempeño ha sido duramente cuestionado y lo acusan de que a raíz de que la escuadra subió a la segunda división serie B ya no se le da oportunidad a los jóvenes de Chilpancingo y prefiere hacer contrataciones de otros estados del país.

A pesar de que la FMF prohibió desde el 2014 que los gobiernos estatales y municipales estuvieran a cargo de equipos de fútbol, el empresario sigue pidiendo apoyos económicos a las autoridades para mantener a flote a Los Avispones.

Fue durante el gobierno del priísta, José Francisco Ruiz Massieu, cuando a través de la administración municipal que encabezaba Florencio Salazar Adame se compró la franquicia a la FMF para fundar Los Avispones en tercera división profesional.

Hasta el 2014, la mayor parte de los recursos para mantener al equipo provenían de los gobiernos municipales en turno.
A la distancia de 37 años de que nació este juvenil equipo que causa pasiones entre los aficionados de Chilpancingo, parece indicar que va a emigrar a otro lugar.

Por cierto, desde las graderías del estadio donde juegan Los Avispones, se puede vislumbrar a simple vista el complejo de “perritos felices” y “casitas felices” que levantó en menos de dos años el senador morenista Félix Salgado Macedonio.

Paradojas de la vida, allá en su albergue del papá de la gobernadora Evelyn Salgado, se nota el dispendio económico contrario a los jugadores de Los Avispones que a veces carecen de una playera para saltar a la cancha.